26 Oct Envejecimiento y Sexualidad
Nuestro modelo de Atención Centrada en La Persona nos ayuda a tratar la sexualidad garantizando los derechos de nuestros mayores
Hemos de adaptar los estándares de envejecimiento activo actual a la situación que existe en la sociedad para modificar la idea equivocada de que el envejecimiento va asociado a la pérdida de memoria y a la pérdida de autonomía.
Las personas mayores son personas autónomas que contribuyen a la humanidad y conservan sus derechos y deberes hasta el último día, siempre que sus facultades físicas y cognitivas lo permitan.
Los derechos sexuales en la vejez son los mismos que en la edad adulta respetando la capacidad de decidir y la autonomía de las personas mayores.
En La Torreta de Piera hemos impartido recientemente una sesión a las familias sobre sexualidad y personas mayores a cargo de Cristina Daza, psicóloga del centro, con motivo de La Marató de Tv3 que este año está dedicada a la salud sexual y reproductiva.
Se ha puesto de manifiesto que la vejez implica solo cambios físicos y aún quedan muchos estereotipos por romper como que la menopausia es el final de la sexualidad o que por el hecho de ser mayor se pierde el interés por el sexo (de hecho la reproducción y el deseo sexual es un instinto básico que nunca desaparece) o que la demencia está asociada a la edad cuando no siempre es así.
Hemos hablado del edadismo o discriminación de la persona por su edad a través de tópicos sociales y prejuicios, sobre todo más en mujeres que en hombres, y de cómo ha marcado a la sociedad la educación, la religión y los valores de las generaciones anteriores siendo la sexualidad un tema tabú todavía para muchos que cuesta hablar con nuestros padres.
Las personas tienen que vivir como si estuvieran en su casa, todo lo que hagamos es por y para ellas
En nuestros centros de Residencias La Torreta, nuestro modelo de ACP, atención centrada en la persona, nos ayuda a tratar la sexualidad garantizando el derecho de las personas a mantener sus preferencias y expresiones sexuales, la identidad y su rol de género, y su derecho a la privacidad.
Este modelo nos permite diferenciar y abordar situaciones entre persona autónoma y persona con demencia y se basa en cuatro principios:
Principio de autonomía: Garantizar la autonomía implica dar apoyo al derecho de las personas a mantener sus preferencias y expresiones sexuales y a garantizar el derecho a la privacidad.
Principio de beneficencia: Que la relación sea consentida y beneficiosa para ambas partes.
Principio de no-maleficencia: Evitar que la persona esté expuesta a comportamientos sexuales no consentidos.
Principio de justicia: En caso de una relación entre dos personas tratar el tema con delicadeza y observar si es consentida o no. Si no lo es ver que actuaciones pueden estar incomodando a la otra persona y tratar el tema de la forma más adecuada.
También este año en La Torreta Eixample El Prat hemos impartido varias sesiones sobre la mujer dirigidas a nuestras personas residentes y familiares donde se han tratado, entre otros temas, la evolución de la mujer en los últimos 50 años en temas de anticoncepción, aborto, divorcio y libertad sexual a cargo de María del Valle, Presidenta de la asociación LGTBI del Prat; y el empoderamiento de la mujer a nivel social, laboral y familiar y de como la publicidad ha sido un reflejo de esta evolución a cargo de Mar Gomila, educadora emocional y responsable de recursos humanos del centro.
Iniciativas que han resultado muy interesantes para los asistentes y que seguiremos fomentando en nuestros centros.